BLURADIODIGITAL:NUEVA DELHI (AP) — India reportó el jueves un récord mundial de más de 314.000 nuevos contagios en un día, en medio de un gran repunte del virus en el segundo país más poblado del mundo que enviaba cada vez a más enfermos a un frágil sistema de salud sin oxígeno ni camas suficientes.
Con 314.000 contagios reportados en 24 horas, India ha contabilizado más de 15,9 millones de casos desde el comienzo de la pandemia. Es la segunda cifra más alta del mundo, por detrás de Estados Unidos. India tiene casi 1.400 millones de habitantes.
Las muertes crecieron en 2.104 en las últimas 24 horas, lo que elevó el total de fallecidos a 184.657, según el Ministerio de Salud.
Muchos hospitales han reportado una grave falta de camas y medicamentos, así como suministros de oxígeno peligrosamente bajosEl Alto Tribunal de Nueva Delhi ordenó el miércoles al gobierno que desvíe el oxígeno de uso industrial a hospitales para salvar vidas. “No puede morir gente porque no hay oxígeno. Supliquen, pidan prestado o roben, es una emergencia nacional”, dijeron los jueces en su respuesta a la petición de un hospital de Nueva Delhi.
El gobierno envió camiones cisterna con oxígeno para reponer los suministros en hospitales.
“La oferta y la demanda se están supervisando a todas horas”, dijo el jueves en un tuit el ministro indio de Salud, Harsh Vardhan. Para responder al aumento exponencial de la demanda, señaló, el gobierno ha aumentado la cuota de oxígeno para los siete estados más afectados.
Las cuarentenas y fuertes restricciones han llevado dolor, miedo y angustia a muchos en Nueva Delhi y otras ciudades.
En escenas repetidas en todo el país, las ambulancias iban a toda velocidad de un hospital a otro, tratando de encontrar una cama libre. Parientes en duelo esperaban en fila ante los crematorios, donde el número de cadáveres que llegan se ha disparado varias veces.
“Todos los días recibo numerosas llamadas de pacientes desesperados por conseguir una cama. La demanda es mucho mayor que la oferta”, dijo el doctor Sanjay Gururaj, médico del Hospital y Centro de Investigación de Shanti, en Bengaluru.
“Todos los días intento encontrar camas para pacientes, y es increíblemente frustrante no poder ayudarles. En la última semana, tres de mis pacientes han muerto en casa porque no pudieron conseguir camas. Como médico, es una sensación espantosa’, dijo Gururaj.
Yogesh Dixit, que vive en el estado norteño de Uttar Pradesh, dijo esta semana que había tenido que comprar dos botellas de oxígeno por 12.000 rupias (160 dólares) cada una, más del doble de su precio normal, para su padre enfermo, porque el hospital estatal en Lucknow se había quedado sin existencias.
Compró dos “porque los médicos pueden pedir otra botella en cualquier momento”, dijo, añadiendo que había tenido que vender las joyas de su esposa para cubrir el coste.
El principal campo de cremación en Lucknow, la capital del estado, recibió casi 200 cuerpos el domingo. “Los cuerpos estaban por todas partes, los estaban incinerando en las veredas pensadas para caminar. Nunca en mi vida he visto semejante flujo de cadáveres”, dijo Shekhar Chakraborty, de 68 años.
En Kanpur, otra ciudad en el estado de Uttar Pradesh, se han colocado 35 nuevas plataformas temporales en la zona de Bithoor-Sidhnath Ghat, junto al Río Ganges, para incinerar cuerpos.
India produce en total 7.500 toneladas métricas (8.300 toneladas estadounidenses) de oxígeno al día, de las que 6.600 toneladas métricas (7.275 toneladas estadounidenses) se estaban dedicando a uso médico, indicó el Ministerio de Salud.
El Ministerio añadió que 75 vagones de tren en la capital del país se habían convertido en hospitales, con 1.200 camas adicionales para pacientes de COVID-19.
El récord anterior de contagios confirmados en un día era de 307.581, reportado el 8 de enero en Estados Unidos, según el diario Times of India.