BLURADIODIGITAL SANTO DOMINGO RD.-Aunque utilizó frases relacionadas al «despilfarro», la «honestidad» y la «transparencia», la persecución a la corrupción fue el tema ausente en la rendición de cuentas del presidente Luis Abinader ante la Asamblea Nacional este 27 de febrero.
El enfrentamiento y castigo al robo de los recursos del Estado, que provocaba aplausos durante la solemnidad de la Asamblea en sus dos primeras memorias, este lunes no se mencionó, a pesar de que ha sido uno de sus más mencionados “logros” vendido por el mismo Gobierno y sus seguidores.
Estudios de Transparencia Internacional han destacado mejoras en el índice de percepción a la corrupción en los últimos dos años, pero ha alertado que se requieren cambios profundos para fortalecer la eficiencia en el manejo de los recursos que corresponden a todos.
No obstante, el mandatario dijo casi concluyendo su discurso que entre el «cambio» que ha representado para el país incluye «cambiar el despilfarro por eficiencia», «cambiar la opacidad por transparencia y honestidad» y «cambiar la impunidad por un régimen de consecuencias».
El jefe de Estado también destacó que durante su gestión, que el próximo 16 de agosto cumplirá tres años, a la Contraloría General de la República se le otorgó una de sus principales funciones, la de realizar auditorías, atribución que, dijo le otorga la Ley 10-07 y la Constitución del 2010.
La Contraloría, afirmó, “tenía las funciones de control interno y de auditoría, hacía solo las de control interno y nunca ejerció las de auditoría”, dijo.
Sostuvo que hasta la fecha se han creado 50 nuevas unidades de auditoría interna, las que se realizan “constantes en un proceso para tener todo el gobierno auditado”.
Para poner un ejemplo de esa función que llevaba a cabo la Contraloría y que antes de su gestión desapareció, recordó que “siendo un niño”, su padre, José Rafael Abinader, fue contralor general de la República, en el gobierno de Antonio Guzmán (1978-1982), que revisaba “en su estudio privado de la casa, casi todas las noches, las auditorías realizadas a las instituciones del gobierno”.
“Una vez nos contó que don Antonio le llamó y le dijo; “chequéame a este funcionario que es medio mañoso”, y mi padre, después de auditarle, le llamó y le respondió: presidente, el hombre es mañoso y medio!”.
Casi al concluir su presentación de memorias aseguró que ha “trabajado sin descanso” para que los fondos públicos sean utilizados para resolver las necesidades de los dominicanos y que cada día trata “de sembrar la idea» de que el gobierno que encabeza «debe ser eficiente, honesto, sensato y respetuoso de los derechos y de la dignidad”. FUENTE DIARIO LIBRE/BR